Los bares de tapas más baratos de Barcelona

Ir a comer a un bar de tapas en Barcelona es una parada obligatoria para todo turista. ¡Y si es barato más todavía!

La comida es uno de los mayores placeres que un ser humano puede disfrutar. Una acción tan simple y básica como alimentarse tiene un impacto enorme en la vida cotidiana de nosotros, las personas. La comida no solo es nutrición, salud o energía sino que también ha sido resignificada como un estilo de vida que cambia las formas de pensar. Por ejemplo: el veganismo propone la no ingesta de productos o prendas de vestir que provengan de animales, pero al mismo tiempo busca cambiar la mentalidad de la gente, lo cual, se vuelve más una forma de vida que una dieta. Hasta este punto ha llegado la necesidad básica de alimentarse.

Pero el aspecto más crucial de la comida es su poder trascendental. Desde los inicios de la humanidad, cuando la guerra o el nomadismo dominaban los tiempos antiguos, la comida era una fuente de energía indispensable. Por ejemplo, el pan ha sido un sustento durante muchas generaciones por su bajo costo y fácil distribución. En conclusión, podríamos decir que los alimentos son tradición, son cultura pura, son rastros de las costumbres que hemos ido heredando y, en simultáneo, re transformando. Uno de los platillos más famosos del viejo continente se encuentran en Barcelona y son las tapas.

Las tapas son un aperitivo típico que se sirve en la mayoría de los bares de España pero en la ciudad de Barcelona son una delicia. Por lo general, para dar una idea gráfica, se trata de pequeños bocados compuestos de fiambres, tostadas y algunos otros condimentos por encima. Hay restaurantes de tapas en Barcelona donde se consume como una entrada para picar y se suele acompañar con alguna bebida alcohólica como la cerveza. En fin, basta charla. Solo estás aquí para ver comer rico y barato ¿Cierto? ¡Ok, vamos entonces!

Tasca La Gresca

Este mítico bar se lo suele denominar como uno de los mejores porque es conveniente en cuantoa precios y ubicación. Si bien es un lugar pequeño y acogedor, los precios son demasiado accesibles. O sea que si eres un viajero hambriento este pequeño bar escondido se volverá tu aliado. Tasca La Gresca es un clasicazo del tapeo de barrio. 2 euros por la caña o el chato de vino y éste (o ésta) viene acompañado de una tapa contundente. La única desventaja es la falta de surtidos, es decir, de variedad.

¿Dirección? Passeig d'Urrutia, 108.

Moll de Rebaix

Si eres de esas personas que prefieren comer en cantidad, repetir plato un montón de veces más allá de la calidad de los alimentos que estés ingiriendo, entonces este lugar es idílico para ti. Debes aprovechar esta oportunidad y venir al Moll del Rebaix. No es precisamente un lugar donde te vayas a topar con gente famosa y de dinero pero sí te aseguramos que te irás inflado de comida. Pides una cerveza artesanal bien fría y te la acompañas con un pescado frito, migas o pimientos del padrón.

¿Dirección? Carer del Baluard, 84.

Sant Antoni

Esto no es un bar. No hay una dirección fija sino que en realidad estamos hablando de un barrio. Aquí tienes que venir un día miércoles y lo debes hacer en el barrio de Sant Antoni, que abre sus puertas con ocasión del circuito de tapas bautizado Tapantoni (contracción de tapas y Sant Antoni). Cada año, en noviembre, participan más de 35 bares. ¿Cómo? Preparando una tapa especial que se servirá toda la noche por 2 ó 3 euros y con bebida incluida. ¡Estiras el fin de semana y ahorras, no puedes pedir más!

Ca’l Chusco

No hay nada más barato que este restaurante familiar, situado justo en el corazón de la hermosa playa de Barceloneta. Si quieres ahorrar algo de plata y no estás seguro si las tapas serán de tu agrado, prueba uno de sus tapas gratuitas que acompañan a tu bebida. Si te gusta lo que comes y quieres más, serás más que bienvenido en pedir porciones más grandes del menú de tapas. ¿Quién dijo que nada en la vida era gratis?

¿Dirección? Carrer l’Almirall Aixada, 5

Euskal Etxea

Barcelona y sus restaurantes de tapas gozan de una popularidad total. Por ejemplo, en pleno barrio de Born, el bar de tapas Euskal Etxea ofrece una gran variedad de tapas que cambian en función de la inspiración de los cocineros y de los productos disponibles en los mercados.

Pero hay algo que no cambia: vas a encontrar clásicos como el jamón ibérico, la tortilla o los pimientos rellenos y las anchoa. Cada tapa cuesta unos 2 euros...

¿Dirección? Placeta de Montcada, 1

Café Milans

Hay veces que tienes hambre y solo quieres comer sin parar, pero suele estar mal visto. Bueno, tranquilo, acá estás en el mejor lugar para eso. ¡Aquí hay comida para todos y todas! Es más, los jueves solo cuesta 3€ disfrutar de tapas una cantidad ilimitada de tapas hasta que no puedas más. Todos los clásicos están disponibles, incluyendo la apreciada tortilla española.

Cafè Milans se jacta de tener una fantástica variedad de cócteles para todos los gustos. Con todo tipo de mojitos a precios razonables, seguro que pasarás una buena noche. Tiene un ambiente relajado, buena música y un staff agradable que harán que sea el lugar perfecto para disfrutar de tapas y cócteles, dos de las mejores cosas de Barcelona.

¿Dirección? Carrer de Milans, 7

Moritz

La experiencia culinaria aquí es moderna y chic, restaurante Moritz, un lugar sin precios exclusivos. Sabemos que suena como publicidad o un eslogan pero lo cierto es que con su menú diseñado por el talentoso Jordi Vilà, que sin lugar a dudas, ha sabido portar el título de la novedad en el sitio. Con una espectacular variedad de tapas, todas ellas focalizadas en la cocina catalana, Vilà hace también especial atención a la calidad de la elaboración en sus platos.

¿Dirección? Ronda de Sant Antoni, 39 – 41.

Golfo de Bizkaia

Este sitio gastronómico es calidad pura, algo que te dejará un buen sabor a la comida clásica española. Ubicado en el área de Born, al borde del barrio gótico, ofrece un personal atento a responder todo. Las excusas para hacer dieta aquí no vale, no solo tienen precios accesibles y de gran variedad de sabores sino que ya se para el desayuno, la comida o la merienda, quizás una cena informal, pero siempre hay una razón para comer pinchos en el Golfo de Bizkaia.

¿Dirección? Carrer de la Vidrieria, 12.

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