Aventura low cost por Marruecos, ¡en busca de los mejores hostales!

Prepárate para descubrir 7 espléndidas ciudades de Marruecos.

Descubrir Marruecos en un viaje low cost a la búsqueda de los mejores hostales. Desde la blanca Casablanca tendida en el océano, hasta Rabat, pasando por Tánger, Chefchaouen, Fez, Ouarzazate, Marrakech y el desierto del Sahara. Un viaje exótico en los escenarios del norte de África, conociendo ciudades y pueblos ricos en historia y cultura antigua. Todo mientras duermes por un precio apto para todos los presupuestos en los mejores hostales de Marruecos.

"NADA ES VERDAD, TODO ESTÁ PERMITIDO" - William Seward Burroughs

Ubicada en la costa atlántica del país, Casablanca es una de las ciudades más grandes de Marruecos, así como su capital económica. La ciudad se hizo famosa por la película homónima interpretada magistralmente por Humphrey Bogart e Ingrid Bergman y destaca por sus características arquitectónicas tradicionales, pero también por la arquitectura moderna. Alberga una de las mezquitas más grandes y hermosas del mundo: la Mezquita Hassan II. Construida en 1990 por el rey Hassan, representa el espejo del Marruecos moderno. Siendo una de las pocas mezquitas abiertas a los no musulmanes, la visita es absolutamente recomendable. En parte construida sobre el agua, destaca por su tamaño: un minarete de 200 metros de altura y una sala de oración con capacidad para 25,000 fieles. Además de albergar una escuela, una biblioteca y un museo, es famoso por su espléndido peripato (el paseo de columnas a lo largo de todo el perímetro).

Créditos Flickr @GiancarloMonti, Casablanca Mosque Hassan II

Igualmente imponente es la Catedral del Sagrado Corazón, construida en estilo neogótico con influencias Art Deco, ahora desconsagrada y utilizada para exposiciones y eventos culturales. No te pierdas el museo que se encuentra dentro de La Villa Des, un edificio de la década de 1930 que alberga obras maestras del arte marroquí, o el espléndido portal del Palacio Real de Casablanca al que los turistas no pueden acceder, o la Piazza Muhammad IV con su famoso mercado donde encontrarás los productos típicos de la cocina marroquí. No te pierdas un paseo por la avenida La Corniche que corre a lo largo del mar, un paseo por el laberinto de calles estrechas de la antigua medina o una visita guiada por el antiguo patio de Mahkama du Pach. El mausoleo de Sidi Abderrahmane ubicado en una isla rocosa frente a la ciudad es sugerente y lleno de misterio. La leyenda dice que este personaje puede caminar sobre el agua y viajar a través de mundos misteriosos. Este lugar está rodeado de misterio y puedes encontrarte con los adivinos que pueblan la zona. Entre los platos típicos que no puedes perderte te recomendamos el cuscús con 7 verduras y mariscos, una verdadera especialidad de Casablanca.

Créditos: Flickr @StevendosRemedios

Dónde dormir:

El Hotel Central se encuentra en el distrito de Medina de Casablanca, a pocos minutos de la Mezquita de Hassan II y del Gran Puerto. Su restaurante ofrece cocina tradicional y se puede disfrutar del té en la espléndida terraza panorámica.

EL ENCANTO ATLÁTICO DE RABAT

Rabat ofrece muchos sitios patrimonio de la UNESCO. Uno de los símbolos de la capital es la Torre Hassan. El proyecto inicial pretendía alcanzar los sesenta metros de altura, pero el edificio se detuvo cuarenta metros después de la muerte del sultán. Muy cerca se encuentra el mausoleo de Mohammed V, dentro del cual está prohibido hacer fotografías.

Créditos: Flickr @StevendosRemedios

La necrópolis de Chellah también merece una visita, un lugar donde reinan la tranquilidad y el silencio y donde la naturaleza y la historia se encuentran. En la antigua ciudad romana de Sala Colonia, puedes ver las cigüeñas que han hecho de estos lugares su hogar. La Medina, el Palacio Real, son otras atracciones turísticas, así como la Kasba degli Oudaïa, un distrito fortificado que sirvió como un punto de partida durante la conquista de Andalucía. Visitarlo hoy significa ir a un encantador pueblecito con casas azules y pasear por los jardines de estilo andaluz.

Créditos: Flickr @JeanFrançoisGornet, Ruelle de la Medina, Rabat

Cerca de la Kasbah está el camino de los cónsules, el alma artesana de la ciudad llena de pequeños tesoros de fabricación. En cuanto a la gastronomía, la influencia de la cocina morisca (de Granada a Toledo) con los dulces M'killa y Kadra R'batiya, y el cuscús con cebolla, pasas, huevos caramelizados y almendras es fuerte.

Dónde dormir:

Riad Meftaha, ubicado en el distrito de Marassa Ocean de la ciudad de Rabat, a 6 minutos a pie de la Kasbah de Oudaïa. Las habitaciones con baño privado dan al patio. La calma, la serenidad, la amabilidad y los descubrimientos culinarios son las consignas de Riad Meftaha, donde es extremadamente agradable tomar una siesta al sol en la terraza y observar las estrellas por la noche.

TÁNGER, LA PERLA DEL NORTE

Conocida como la "perla del norte", la ciudad de Tánger ofrece conexiones de ferry con España. Podría ser un punto de partida ideal si decide viajar en automóvil o una de las paradas si el viaje comienza en Casablanca.

Créditos: Flickr @StevendosRemedios, Grand Scocco.

Considerada durante mucho tiempo como capital cultural para escritores y artistas, es una de las ciudades más antiguas del norte de África, impregnada del encanto de las historias de Las mil y una noches. Comencemos con el Grand Socco, el mercado de Tánger que alberga muchos cafés, restaurantes y vendedores ambulantes. Tánger es una ciudad portuaria y es conocida por sus excelentes sopas de pescado. La gastronomía y los aromas intensos no son la única forma de ser fascinados por la ciudad. Las vistas son tan maravillosas y la ropa usada por los habitantes como la firma de los artesanos locales es un tumulto de colores. Para entrar en el corazón de la medina, se pasa por la gran arcada, el portal blanco y, avanzando, se encuentra fascinado entre varios zocos y callejones, como el ruelle de Sidi, la calle del sastre con los artesanos que trabajan con carretes de hilo. Continuando el camino nos encontramos con la puerta de la Kasba, junto a la cual nos encontramos con encantadores de serpientes, cuentacuentos, músicos y sugerencias que se refieren a España.

El cabo Spartel, donde el Atlántico se encuentra con el Mediterráneo, alberga un faro del siglo XIX y en el mismo camino se encuentran las playas de Tánger y Achakar, así como las Cuevas de Hércules (donde habría descansado después de sus 12 labores). Otras atracciones notables para los amantes de la naturaleza son el parque Perdicaris, el Jardín Mendoubia, el Museo de Arte Contemporáneo, la Galería de Arte de Medina y el palacio Dar el Makhzen.

Dónde dormir:

Dar Omar Khayam se encuentra a cinco minutos a pie del mar y a diez minutos del centro de la ciudad. En Dar (casa tradicional marroquí) puedes desayunar en la terraza, leer un libro en la habitación marroquí o tomar el sol tranquilamente en el patio.

El Melting Pot Tangier Hostel es ideal si quieres conocer gente y viajar solo. Este hostal cuenta con un bar, una gran cocina y dos terrazas donde se puede hacer una barbacoa. El Melting Pot Tangier Hostel colabora con muchas empresas de la ciudad para ofrecer actividades como kitesurf, windsurf, buceo, paseos a caballo, paracaidismo y senderismo en las montañas o en playas vírgenes.

CHEFCHAOUEN, LA CIUDAD AZUL

Ya hemos hablado de Chefchaouen, conocida como la ciudad azul, en nuestro artículo sobre la terapia de color durante el viaje. La ciudad tiene 40.000 habitantes y se encuentra en las montañas. Chefchaouen es un oasis de paz, lleno de encanto y autenticidad, y es considerado uno de los pueblos más hermosos de Marruecos. Hay tantas cosas que ver en la ciudad azul: la Medina y la Gran Mezquita, la fuente de Ras El Maa, la cueva de Toughoubit, el Pont de Dieu en Akchour, el bosque de Talassemtane, las cascadas y la mezquita de Cherafat, todos espléndidos lugares que visitar.

FEZ, LA REINA DEL MAGREB

Fez, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Algunos de sus barrios son únicos y verdaderamente característicos, especialmente los curtidores de cuero. Los artesanos tienen una terraza para vigilar sus pozos donde se realiza el bronceado, tal vez el olor no sea el más agradable, pero el ambiente que reina es de autenticidad y trabajo cotidiano.

Créditos: @wandering.rox

Caminando por otras calles se llega al portal de Bab Bou-Jeloud, que limita el casco antiguo con las paredes de Fes el Bali. El espléndido portal en el centro de otras dos puertas más pequeñas data de 1913, y su faenza, un tipo de cerámica, estaba acristalada con los colores de la ciudad (azul y verde). El Bali es la zona más antigua, y no ha cambiado en 1000 años. Hacia el noveno, los andaluces llegaron para unirse a Marruecos, y luego el distrito andaluz nació poco determinando las dos culturas de la ciudad. Alrededor de la ciudad hay otros descubrimientos por realizar: el Borj norte, una fortaleza que data del siglo XVI, la mezquita Karaouyine que alberga la sede de la universidad musulmana, la ciudad de El Jedid, al norte de la ciudad.

Créditos: Flickr @annaspies

Dónde dormir:

Relájate en un auténtico edificio antiguo de Fez transformado en un bed and breakfast Dar Bensouda. Jardín, piscina, patio e incluso un baño turco. Todo lo necesario para garantizar una estancia agradable.

EL DESIERTO DEL SAHARA

Merzouga es conocida por sus dunas, las más altas del país, incluyendo el Erg Chebbi. Las dunas son un orgullo de la zona, una maravilla natural que deslumbra cada vez que los visitantes la visitan, ya sea por la mañana al amanecer o por la noche contando las estrellas. Se dice que esta arena tiene propiedades terapéuticas y es útil para tratar enfermedades reumáticas, por lo que no es sorprendente ver a personas de todo el mundo tomando baños de arena durante el verano. Es el lugar ideal para hacer un viaje al desierto, también porque muchos operadores turísticos ofrecen recorridos en camello, alquiler de quads o incluso bivouacs organizados bajo las estrellas.

En el camino a Ouarzazate, una ciudad moderna en Marruecos que se expandió en la década de 1920, puede detenerse para visitar las gargantas del Todra, el oasis de Palmaria en Skuora y el Valle de las Rosas (donde solo dos veces año florecen las encantadoras rosas de Damasco, una tipología típica del lugar).

Dónde dormir:

Con un colorido estilo bereber, la casa de huéspedes La Vallée des Dunes se encuentra en el pueblo de Hassi-Labied, a 10 minutos de Merzouga. La terraza tiene una vista especial de las dunas y su restaurante ofrece cocina casera tradicional.

UARZAZATE "LA ESTRELLA DEL CINE"

Idolizados por los cineastas para el rodaje de sus películas, no es casualidad que sea apodado el Hollywood de Marruecos. Uno de los monumentos más importantes es la Kasbah de Taourirt, del siglo XVII, que fue la residencia del pasha de Marrakech, un alto dignatario de la realeza marroquí. El mercado artesanal en Ouarzazate también es muy importante. ¿Su especialidad? ¡Las alfombras!

En el camino a Marrakech, se encuentra el pueblo de Ait-Ben-Haddou, que podría dar una impresión de déjà vu. De hecho, muchos cineastas lo usaron como escenario para filmar muchas películas de escenarios históricos: Gladiator, Asterix y Obélix: Misión Cleopatra, Alexander, Babel o Prince of Persia: las arenas del tiempo. También algunas secuencias de la serie de TV de Juego de tronos se rodaron en Marruecos y se podrían agregar a la gira Essaouira y Ait-Ben-Haddou conocidas como Aspator y Yunkai en la serie. Hablando de comida, Uarzazate es conocido por su cuscús, tagines et Madfouna, y es una cocina marroquí rica en especias.

Dónde dormir:

Una estancia temática es el Cinema Riad Ouarzazate. La propiedad está idealmente ubicada entre el hermoso valle de Tabounte Ouarzazate y las hermosas montañas del Alto Atlas. Puede desayunar en la sala bereber y relajarse en la terraza.

MARRAKECH "LA CIUDAD ROJA"

La ciudad es conocida por muchos motivos entre los eventos que organiza, tales como el Festival des Arts Populaires de Marrakech, Art in Marrakech, y el Festival del Sol: festival nacional de la juventud y la música, Festival de música sacra Samaa, Festival de Danza Contemporánea, Internacional. Festival de cine de Marrakech o Marrakech du rire ("la manifestación de la risa"). La ciudad está recurriendo cada vez más al turismo de lujo, sin embargo, muchos lugares siguen siendo accesibles para todos los presupuestos. Jema-el-Fna es la plaza en el corazón de la medina, y es el centro vital de la ciudad. Una gran cantidad de puestos durante el día animan el mercado en el que se llevan a cabo las actividades más variadas y características: varios jugadores de instrumentos, encantadores de serpientes, adiestradores de monos, decoradores de henna y muchos otros.

Los monumentos más importantes son las tumbas saadíes que datan del siglo XVI, el Palacio de la Bahía construido en el siglo XIX o la Koutoubia, el edificio religioso en Marrakech (que solo se puede visitar desde el exterior). Si prefiere la naturaleza, el Jardín Botánico Majorelle es impresionante y a pocos kilómetros de la ciudad se encuentra la Menara, el olivar más grande de la ciudad.

Dónde dormir:

Boho 27 Hostel en Marrakech, tiene un patio muy cómodo para relajarse, un balcón para tomar el sol y un salón compartido. El personal se encarga de los clientes mediante el traslado desde el aeropuerto. Las características especiales del hostal son la posibilidad de tomar clases de cocina.

¿Marruecos te ha conquistado y has decidido visitarlo? Recomendamos el coche para viajar, para ser más libre y para tener acceso a pueblos de montaña como Chefchaouen. Sin embargo, tren y autobús son dos alternativas que pueden tomarse en consideración. Con respecto a la duración del viaje, obviamente depende de los días que tengas disponibles, pero te recomendamos que te quedes por lo menos 1 semana para ver el mayor número de lugares posible. La nueva tendencia es, de hecho, el viaje lento, como escribimos en el artículo "Viaje lento" en Francia.

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